



Este fin de semana hemos estado en Bacares la family al completo, a parte de recordar aquellos maravillosos años, la gente nos ha recibido con una "calorcita" propia de una pequeña familia, yo he recordado mi infancia y como buenos serreños hemos comido a lo grande, bebido, bailado, reido y andado por sus caminos, tenéis que ir...es un pueblo con mucho encanto.
Lo curioso es que, después de 26 años la gente se acordaba y todos nos emocionábamos al vernos.
Aquí os dejo unas cuantas fotos. Besicos pa´tos.